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sábado, 21 de septiembre de 2013

Orchestral Manoeuvres In The Dark - English Electric (2013)

ANTECEDENTES E INTRODUCCIÓN.
Esta semana continuamos analizando la actualidad en lo que a nuevos lanzamientos de grupos consagrados se refieren dentro del género de la música electrónica. Llega el turno de Orchestral Manoeuvres In The Dark y su “English Electric”, flamante nuevo lp editado hace unos pocos meses, casi al mismo tiempo que el “Delta Machine” de Depeche Mode que analizamos la semana anterior.

OMD venían de un regreso discográfico de la formación clásica que dejó bastante buen sabor de boca. “History Of Modern” de 2010 demostró dignidad y buen hacer por parte de McCluskey, Humphreys, Holmes y Cooper. Su gira de presentación mantuvo la excelente aceptación que ya tuvo la gira previa, piedra de toque o chispa para que la maquinaria de OMD volviera a rodar, dedicada a recuperar “Architecture & Morality” en directo.

No mucho después de terminar con la gira de “History Of Modern” en alguna entrevista Andy McCluskey informó que ya se habían puesto manos a la obra para dar forma al siguiente disco e incluso nos adelantó el título final y definitivo, “English Electric”. Ya desde meses antes del lanzamiento, el grupo fue mostrando destellos por internet del trabajo y en las entrevistas contemporáneas dejaban entrever que tomaban de nuevo el prisma del trabajo realizado en sus primeros 4 discos, poniendo de relevancia su gusto por Kraftwerk y la influencia de los alemanes en OMD, pero adaptando el sonido a los nuevos tiempos.

Creo que no pudieron ser más sinceros en esas declaraciones. Pocos grupos se dedican a ser honestos poco antes de lanzar un nuevo disco; la mayoría se vanaglorian del resultado obtenido, siendo poco objetivos. OMD dijeron simplemente lo que habían realizado, sin necesidad de valorarlo. Si se cumplían los pronósticos, los fans del grupo sabíamos que la cosa valdría y mucho la pena. Por fortuna, así ha sido. Pasemos a analizar el contenido de “English Electric”.

ANÁLISIS DEL DISCO.
1. “Please remain seated”: A modo de una introducción experimental como aquella “Radio Prague” que abría “Dazzle Ships”, con “Please remain seated” nos dan la bienvenida a “English Electric”. Una robotizada voz de azafata nos da las pautas para adentrarnos en este nuevo disco de OMD. Hagan caso y por favor, permanezcan sentados.

2. “Metroland”: Andy, Paul y cia. no tardan en poner un peso fuerte sobre la mesa y “Metroland”, correcto 1er. single extraído del disco, se sitúa en 2º lugar del track list. Estamos claramente, no me lo negarán ustedes, ante una canción claramente heredera del sonido de Kraftwerk de su descomunal “Trans-Europe Express”. No solamente me baso en el sonido de sus teclados y su melodía, tan pareja a “Europe endless”, sino que hasta el guiño lo vemos en el título de la canción y el videoclip de animación (con tímida representación de los 4 miembros del grupo), con ese viaje en tren que se plasma. Dejando de lado las semejanzas o paralelismos, “Metroland” es una canción muy bonita y emotiva; sencilla y sentida. Cabe reseñar que ha tenido su cierta difusión en Kiss Tv en los meses de este verano de 2013 que ya agoniza.

3. “Night cafe”: Me abstendré de hacer bromas facilonas con el título de la 3ª canción del disco. Con “Night cafe”, Orchestral Manoeuvres In The Dark nos presentan otro de los singles que de momento han salido de “English Electric”. Su sonido es más clásico y manierista que el patrón que marca en su melodía “Metroland”. No obstante, no se deja de lado el toque cristalino de las notas, aunque la producción les concede aquí una mayor pompa. Andy McCluskey se muestra más relajado al micrófono que en “Metroland”, donde había momentos de algún arrebato intenso al cantar, sobre todo en su estribillo. OMD claramente apuestan por un sonido delicado y frágil, al menos en estos primeros pasos, ya que a medida que avancemos por el disco habrá espacio para momentos más alocados o divertidos y más experimentalismo. En todo caso, bajo mi punto de vista “Night cafe” es otra gran canción que desprende dignidad compositiva por todos sus vértices.

4. “The future will be silent”: Tras 2 momentos pop tan bonitos hay que volver al experimentalismo. Con “The future will be silent”, OMD nos presentan una arriesgada pieza, con retorcidos y potentes sintetizadores alternados con otros sonidos más saltarines. Preguntas y respuestas en torno al título de la canción repitiendo el patrón de forma hipnótica, vocoders usados a la vieja usanza y un giro melódico interesante para la 2ª parte del tema, más atmosférica, es lo que define a grandes trazos a este tema, debido al cual y a otros tantos nos recuerda tanto a “Dazzle Ships” este nuevo “English Electric”.

5. “Helen of Troy”: Me van a permitir más que nunca los paralelismos en este artículo, pero es que “Helen of Troy” podría resultar fácilmente del resultado de restar la mitad de su vértigo a “Telegraph”. Andy, en otro claro guiño al pasado y composiciones previas, toma como prisma a otra musa (como ya hizo en su día con Juana de Arco y con la actriz de cine mudo Louise Brooks), en este caso a Helena de Troya, pero en esta ocasión la letra es menos complaciente que en ocasiones previas. Quizás no llega en la primera escucha, pero no tarda muchas más en convertirse en un momento agradable y ciertamente simpático de “English Electric”. Las bases son rotundas y potentes, sobre los que el grupo dispone unos sintetizadores que se alejan de la delicadeza del sonido de las notas de “Metroland” y “Night cafe”. Otra buena canción.

6. “Our system”: De sensaciones espaciales y con toques de grandiosidad en su melodía y en la producción, llega “Our system”. Los efectos ampulosos de los coros celestiales le conceden una notable solemnidad. OMD apuestan de nuevo por bases y notas sintéticas muy marcadas para esta lenta canción. Creo recordar que en “Dazzle Ships” también había algún tema de factura parecida a “Our system”, ¿no? Estoy seguro que ustedes sabrán decírmelo en sus comentarios al pie del post.
7. “Kissing the machine”: Por sus primeros segundos, podemos pensar que estamos ante otro tema experimental, pero no. Aquí vuelve a aparecer el influjo de Kraftwerk claramente en las sensaciones que nos evoca la melodía de esta “Kissing the machine”. ¿O es que acaso soy yo el único al que le viene a la mente “Neon lights” de los alemanes? Pero, cuidado, una cosa es que nos evoque su sonido y otra cosa que estemos hablando de plagios o cosas por el estilo. OMD toman como prisma, cosa que admitieron mucho antes de que el disco viera la luz, a Kraftwerk (siempre influjo para las composiciones del grupo) y de ahí dan forma a canciones realmente fabulosas. Con “Kissing the machine” el grupo presenta otra canción que anota alto en la melodía y su desarrollo. Prácticamente todas las canciones del disco terminan por llegar a agradar y ésta no es una excepción. La sencillez de los elementos, su elegancia y lo fresco y radiante que sentimos a Andy McCluskey al micrófono, son el compendio perfecto en la 7ª pista sonora de “English Electric”.

8. “Decimal”: Ahora sí que el grupo presenta otra pieza experimental. De hecho, “Decimal” fue uno de los aperitivos que el grupo publicó por Youtube antes de sacar el disco. Vocoder contando y sonidos de contestador automático componen este interludio o descanso que proponen Orchestral Manoeuvres In The Dark, muy a su vieja usanza.

9. “Stay with me”: Se echaba de menos escuchar a Paul Humphreys cantar una de las canciones del grupo, ya que en “History Of Modern” no tomó en ningún momento esa función. Con “Stay with me” el grupo toma como prisma a sí mismo, ya que aquí el referente claro es “Souvenir”. Sin llegar, ni mucho menos, a la gloria de aquel single de “Architecture & Morality”, se da lugar a una balada digna; esto opino yo, aunque fans reputados del grupo me han mostrado su animadversión por “Stay with me” en alguna tertulia informal que tuve este verano pasado. En lo instrumental el grupo retorna a los sonidos cristalinos y delicados de los primeros temas del disco, lo cual me hace pensar que quizás (también a la vieja usanza) le concedan a “Stay with me” el honor (quizás excesivo) de ser single y permitir que Paul se anote otro single cantado por él en la historia de OMD.

10. “Dresden”: Quizás en “Dresden” es donde más atronador escuchamos el potente bajo de Andy McCluskey. Se deja de lado el sentimentalismo de “Stay with me” para presentarnos la otra pieza desenfadada, e incluso alocada y acelerada, de “English Electric”. La canción es vertiginosa, enérgica y divertida, pero sin perder de vista el sonido y las pautas que “English Electric” ha dejado bastante claras desde sus primeros minutos. A buen seguro, si es que está incluida en el set list, “Dresden” funcionará muy bien en el directo, cuando el grupo retome la gira que han tenido que suspender de momento (hablaremos de esto en el final del post).

11. “Atomic ranch”: Me encanta el carácter crítico velado que tiene la última experimentalada del disco. En “Atomic ranch” podemos escuchar las ambiciones de clase media que más o menos cada hijo de vecino se monta llegada una edad. La música es inquietante y algo chirriante. Al fin y al cabo todos ansiamos una vida perfecta, tal como dicen las voces que aquí aparecen.

12. “Final song”: Bueno, esto ya sí que serán cosas mías, pero “Final song”, el correcto final de “English Electric”, me recuerda en su melodía al “Charlie don’t surf” del “Sandinista!” de los The Clash. Aquí acompañan voces femeninas de forma decidida a un susurrante y tranquilo Andy McCluskey. Es un epílogo agradable, de sonido atmosférico o incluso estratosférico, que juega su papel de cara a no quitar protagonismo a piezas previas mejores, pero que pone el broche con la cabeza alta.

RESULTADO, CONCLUSIONES Y REFLEXIONES.
Por desgracia, una banda como OMD no lo volverán a petar (hablando un poquito en slang). Su época masiva pasó hace mucho mucho tiempo y solamente los fans somos los que nos enteramos de sus lanzamientos, los cuales celebramos con mucha animosidad, ya que tanto “History Of Modern” como este “English Electric” son como para que los que admiramos su historia y legado estemos muy orgullosos de ellos; ojalá Depeche Mode, dentro de su estilo particular, fueran capaces de entregar un disco al nivel de éste.

Es decir, que “English Electric” no ha estado sonando a tope en las emisoras como sí que en su día sonaban otros singles del grupo, pero sí que se ha visto el video de “Metroland” en Kiss Tv con bastante frecuencia, lo cual es un cierto logro. En el apartado de gira, el grupo (como ya mencioné antes) ha tenido que cancelarla debido a la salud del carismático batería Malcolm Holmes, al cual ha terminado pasando quizás factura su obesidad, ya que en mitad de un concierto le dio un ataque cardiaco; deseamos a Malcolm que se recupere lo antes posible y que el grupo retome el pulso al directo y de paso regresen por nuestras tierras, sobre todo visto el exitazo de su último concierto en Madrid.

Resultado comercial aparte, “English Electric” quizás sea el mejor disco que el grupo ha sellado desde 1983. En aquel año fue “Dazzle Ships”, un trabajo muy incomprendido en su día, la joya que selló el grupo y que a la larga puso punto y final a un inicio de discografía sin posibilidad de queja alguna. Luego el grupo viraría a lo comercial hasta su desmembración en 1988 y con McCluskey como único componente hubo resultados diversos en calidad.

History Of Modern” marcó el regreso del cuarteto clásico tras reunirse con notable éxito para la gira de celebración del 25º aniversario de “Architecture & Morality”. En este disco se apreciaba un sonido bastante maduro y un eclecticismo a ratos bastante interesante. Con “English Electric” Orchestral Manoeuvres In The Dark han conseguido la difícil tarea de aunar el sonido actual de “History Of Modern” con las pautas sonoras y de trabajo que el grupo decidió interrumpir, en pro de la comercialidad rápida, en 1983. Y es que afirmo que si metemos en una batidora a “History Of Modern” y “Dazzle Ships” nos daría como resultado el líquido que solidificado forma “English Electric”.

Personalmente me ha gustado mucho “English Electric”, un disco donde las portadas geométricas marca de la casa, prosiguen al igual que ya sucedió en el retorno con “History Of Modern”. OMD ya no nos van a descubrir América, o eso creo (nunca se sabe…) y además servidor de ustedes no soy de los que recriminan a las bandas que evolucionen. Me conformo con que un grupo haga lo que sabe hacer bien. Nunca hubiera apostado por un trabajo nuevo de OMD a estas alturas en el que se abordara de forma clara y decidida la experimentalidad y se tuviera tan presente a Kraftwerk y a su sonido para elaborar las canciones. Por ello, tras ver el resultado total de “English Electric” estoy tan satisfecho, aunque ya con los adelantos que iba sacando el grupo (“Decimal” y “Atomic ranch”) ya imaginaba por donde iban a ir los tiros.

Resumiendo, sobresaliente para Andy McCluskey, Paul Humphreys, Malcolm Holmes y Martin Cooper. Editar un disco así a estas alturas de su trayectoria musical y vida en general es todo un tanto a su favor. Veremos qué futuro nos plantearán Orchestral Manoeuvres In The Dark en sus próximos lanzamientos discográficos ahora que han decidido tomar la vía que dejaron muerta en 1983. No sé ustedes, pero yo estaré muy atento a ello.

5 comentarios:

AAAALLLLL dijo...

Lo cierto es que los dos albums de regreso de OMD son un autentico ejercicio de dignidad, como bien dices ojala los Depeche siguieran esos mismos derroteros pero no tendremos esa suerte.

Evidentemente ni “history of modern” ni este “english electric” van a pasar a la historia ni van a competir con la etapa dorada del grupo (esos 4 primeros albums), como dije antes en el articulo de DM, ni los impulsos, ni la motivación son las mismas que hace 30 años con lo cual es imposible volver a parir discos como “Architecture&morality” o “Dazzle ships” pero detecto ilusión, ganas de demostrar que aun pueden hacer buenos discos, buenas canciones y una reafirmación de su influencia de su vigencia, ganas de volver a poner el nombre de OMD donde le corresponde despues de mucho tiempo en el que parecían olvidados, quizás a los grupos veteranos les venga bien esos largos periodos donde el grupo esta separado sin producir nada, es una forma de no desgastar la marca y de no aburrir, algo en lo caen grupos veteranos como DM o Erasure que a base de sacar discos han terminado aburriendo a sus propios fans.

Un amigo me comento que “English Electric” le parecía una especie de versión digital de “Dazzle Ships”, algo de eso ahí aunque considero que se tira mucho mas al pop que a la experimentación, esta ultima me parece puramente anecdótica exceptuando el tema “the future will be silent” que lo encuentro bastante logrado, el resto son pequeños detalles como “atomic ranch” que como dices tiene su parte de crítica velada a las aspiraciones de una clase media que ya no existe pues ha sido o está siendo aniquilada por la crisis, con lo cual esta canción tiene un cierto toque nostálgico y mas nostálgico nos parecerá según van pasando los años. Ese mismo carácter está en la propia “metroland” una de mis favoritas del álbum y que hace referencia al consumismo y a burbujas inmobiliarias, algo que no nos es nada ajeno.

Otra de mis favoritas es “night café” que me recuerda un poco al “say hello wave goodbye” de Soft Cell, de hecho me puedo imaginar perfectamente a Marc Almond cantando este pedazo de tema de OMD.

Tambien destacaría “our system”, uno de esos temas que van increscendo hasta explotar en un tema grandioso comparable a “Maid of Orleans” y hablando de esta ultima tenemos “Helen of troy” pero al contrario que en el caso de Juana de Arco o de Louise Brooks, esta vez simplemente utiliza al personaje como escusa para hacer una metáfora sobre la distancia y el perder a alguien.

En cuanto a “kissing the machine” no es que suene a Kraftwerk, es que es una versión de un tema incluido en el primer álbum de Electrik Musik, el proyecto de Bartos tras dejar Kraftwerk, la canción esta originalmente co-escrita por Bartos y McCluskey y cantada por este último, lo cierto es que aquí OMD le han echado bastante morro pues apenas han cambiado nada de la original (que puedes escuchar en youtube), simplemente le han quitado un poco el polvo y ya está.

Por su parte el segundo single “Dresden” me recuerda mucho a “sister mary says” que a la vez recuerda mucho a “enola gay”, es decir “Dresden” es el “enola gay” de “English Electric” como “Sister Mary Says” lo era del “History of Modern”, en definitiva un tema resultón que gusta pero no enloquece y que sin duda es de esas que funcionan muy bien en directo.

También tenemos la canción cantada por Paul “stay with me”, recuerdo que muchos seguidores de la banda echamos mucho de menos un tema cantado por Paul en el anterior álbum, asi que la noticia de un tema cantado por Paul me dio esperanzas de que quizás seria una de esas canciones que se marca de vez en cuando y que tan bien quedan en los albums del grupo pero el resultado es sinceramente decepcionante, una especie de “Dreaming” descafeinado que no tiene el nivel suficiente para estar en el álbum, mas hubiese valido haberla dejado fuera e incluir un par de temas experimentales que se quedaron como caras b.
Por otro lado hay que decir que Paul se ha implicado poco en este album y tan solo 5 canciones llevan su firma.

AAAALLLLL dijo...

Bueno ya no me enrollo mas, nos encontramos ante un disco de notable lleno de grandes canciones, lejos de sus cuatro albums magnificos como no podía ser de otra forma, pero realmente remarcable.

Yo siempre hago la misma prueba para valorar los nuevos discos de grupos veteranos, asi que te propongo esta prueba a modo de juego. La prueba consiste en hacerse a si mismo la siguiente pregunta:
¿Si el ultimo disco de DM fuera el primero de una banda desconocida, le prestarías atención? Mi respuesta sería un rotundo no.
Sin embargo si me hago la misma pregunta con “english electric”, diría sin dudarlo SI.
Eso significa algo.

Un abrazo

Abacab dijo...

KENZO Y EL DRAGÓN, primero de todo, disculpas por la tardanza en responder.

Madre de Dios qué comentario más largo! Creo que supera al post en sí. Estamos en bastante de acuerdo según saco en conclusión. Creo que es un gran disco y que supera incluso al ya notable "History Of Modern". Muy grandes OMD.

Un abrazo y gracias por escribir.

cvb dijo...

Conste que estoy de acuerdo con la crítica a este disco y celebro como el que más la doble facturación en disco, de este regreso de OMD. Además de que tuve la suerte de verlos en Bristol, en el Bristol Dome-concierto que nunca olvidaré porque es el primero y único al que asistió mi hija mayor -hoy de 8 años- entonces tendría 3, y lógicamente con el preceptivo aparato auditivo para menores. Fue la gira de "The history of modern". Y la incorporación de sus nuevas canciones encajaron perfectamente con sus clásicos inmortales. De hecho creo recordar que "Sister marie says" precedió a "Enola gay".
Obviamente estábamos en zona numerada-sentados-, y ví muchas madres o padres, con hijos-no tan pequeñas como mi hija entonces- pero si de 7 o 8 años. Fue una impresión extraña y a la vez bonita.
Si ya celebré el retorno de este disco, he de decir que "E.Electric" me ha gustado aún más. Motivos: Es más conciso, lleva una dirección clara y definida. En "H.of modern" no funcionaban igual los temas que retrotraían a OMD de sus primeros cuatro discos, con el resto, que era una especie de intento de repaso por la trayectoria global de la banda.
Aquí, no, aquí la referencia son los cuatro primeros discos. De forma clara.
Por poner pegas, que yo no las pongo, sería la discusión típica de que en realidad recurren continuamente a "auto-plagiarse" con temas que recuerdan inevitablemente a sus grandes clásicos. Es así, ¿y qué?. ¿Qué les voy a pedir a estas alturas, que hagan EDM o chile out, o heavy? Sería absurdo. Ellos son conscientes, por otra parte, de que hacen discos para los fans. Ojo, ello no quita para que si algunos chavales jóvenes quisieran descubrir la banda, la calidad y la comercialidad -potencialmente, hablando-de este disco, pudiera introducirles a un "the best of " de la banda y descubrirlos. Pero ha de ser por cauce vía familia o internet. En la radio no sonará nunca más, por desgracia lo nuevo de OMD, por bueno que sea, que lo es.
En ese sentido, ya que se compara mucho a DM con sus contemporáneos tecno, es impensable que enganchen a nuevas generaciones, con algunos de sus últimos discos.

Abacab dijo...

Cvb, qué bonito la experiencia del directo con tu hija, la verdad. Nosotros vivimos un concierto inolvidable en Madrid de esa misma gira con casi todos los colaboradores de "DMR" entre el público y en grupeta. Está claro que estos discos son para los fans añejos de OMD y nadie se va a sumar al carro por escucharlos. La historia es al revés: se podrán sumar nuevos fans escuchando los discos antiguos y al descubrir estos últimos dirán "pues tampoco están nada mal".

Gracias por escribir.